A dos días del duelo que podría significar la clasificación para Junior, su entrenador, Luis Amaranto Perea, hizo un diagnóstico de cómo se encuentra el equipo a nivel anímico de cara al partido ante las Águilas de Rionegro.

Perea reseñó el buen ánimo de sus jugadores que ya respiran más tranquilos con un buen juego y resultados positivos. Eso sí, ya les advirtió que todavía no se ha ganado nada. 

“Estamos contentos. Las sensaciones a nivel general son buenas, el equipo jugó bien. Se ve alegre, no se ve tan tenso y han llegado los resultados que dan tranquilidad. Pero también hemos hablado que el objetivo no está cumplido, no nos podemos relajar y tenemos que tener la tensión necesaria para encarar lo que falta. La tabla está muy difícil y esto nos tiene que tener en alerta”, advirtió. 

Perea reflexionó sobre la actualidad del torneo colombiano, el cual no dudó en calificar como el más luchado por sus participantes, en mucho tiempo.  

“Diría que en los últimos años, es el torneo más ajustado. Ha tocado así, Cali hace 9 partidos que no ganaba y hoy se pone tercero gracias a la ventaja que sacó al inicio del campeonato. Este es un aviso, no solo para Junior, y para todos los aspirantes, de no relajarse. En nuestro caso, tenemos todo a favor. Entendimos cuál es el camino, si bajamos la intensidad sufrimos”, dijo. 

Sobre el rival de turno, Águilas de Rionegro, señaló que tienen un jugador que marca la diferencia, pero que su escuadra se enfocará en mantener el juego que ha realizado. 

“Águilas es un equipo ya el año pasado nos complicó. Es muy cerrado, con un jugador que es de los buenos futbolistas del fútbol colombiano, como es Christian Marrugo, que con su experiencia y capacidad para interpretar y manejar el partido lo hace un rival difícil. Pero nosotros estamos bien, vamos a enfatizar dónde venimos creciendo. Es  la mejor herramienta que tenemos”, aseguró. 

Para finalizar, sobre los lesionados Jhon Pajoy, Miguel Ángel Borja y Fabián Ángel, señaló que espera por ellos pronto, pero que tampoco van a tomar riesgos y esperará lo que haga falta. 

“Los muchachos saben que los estamos esperando. Pero deseamos que se recuperen bien, respetamos mucho la parte física y siempre lo he dicho, que no vamos a arriesgar a nadie. Cuentan con el tiempo adecuado para que se puedan recuperar. Ojalá se pueda acelerar el proceso sin ponerlos en riesgo”, cerró.